“Es como si Converge, Cult Of Luna y The Locust consiguieran que Frank Black de Pixies escribiera algunas canciones para ellos. Absolutamente aterrador.” – Metal Hammer
“Castigadoramente fuerte, con voces gritadas, riffs imponentes y percusión contundente, inspirado en influencias de nicho como Siege, Slayer, Melvins, Sleep y Mike Patton.” – Rolling Stone
“Inspirados por su amor compartido por todos los subgéneros del metal, desde thrash hasta grindcore y casi todo lo demás.” – DIY
Hace una década, Simon Neil y Mike Vennart se encontraban sentados en la parte trasera del autobús de gira de Biffy Clyro compartiendo la música más extrema, conflictiva o simplemente retorcida que podían encontrar. Simon siempre había tenido el nombre Empire State Bastard acechando en el fondo de su mente si alguna vez formaba una banda enfermizamente pesada, dejando a Mike con el desafío de escribir música que pudiera estar a la altura de ese apodo. Ahora los resultados están listos para ser revelados con la noticia de que Empire State Bastard lanzará su álbum debut ‘Rivers of Heresy‘ el 1 de septiembre. Se produce después de que la banda compartiera su sencillo debut ‘Harvest’ y completara una gira de entradas agotadas al instante.
‘Rivers of Heresy’ fluye con pura aniquilación sónica. Extendiéndose por el panorama del metal alternativo, las canciones de Mike golpean como una colaboración a toda velocidad entre Siege y Slayer (‘Stutter’, ‘Palm of Hands’), juegan entre el caos matemático y la ferocidad grindcore (‘Blusher’, ‘Sold!’) o se tambalean con la amenaza del stoner rock en cámara lenta (‘Sons And Daughters‘). La mayor sorpresa en un set revelador viene con ‘Tired, Aye?’, un asalto despojado de solo voces y batería en el linaje de Naked City de John Zorn. Entregando letras mórbidamente misantrópicas, la voz de Simon es igual de ecléctica, extendiéndose desde los gritos y jadeos del trabajo de Mike Patton con Fantomas hasta gruñidos guturales de muerte que hacen eco de Morbid Angel o Mayhem, así como todo tipo de otras expresiones grotescas.
Como Mike cándidamente admite, “Me puse a hacer la música más vil venenosa que pude, solo odio absoluto en forma musical.”
Simon añade, “Líricamente, es tan misántropo y nihilista como nunca he escrito.»
Es un sonido que requiere un baterista ejemplar, por lo que llamaron a los mejores en el negocio: Dave Lombardo de Slayer, Testament, Dead Cross y otros innumerables proyectos. Sus actuaciones son similares a un tren desbocado que se queda en las vías, la ráfaga propulsora de los rellenos maníacos y las dobles patadas de pies veloces pulverizan y surcan en igual medida. La banda se completa para shows en vivo por el bajista Naomi Macleod (Bitch Falcon).
Fuente: Jorge Gaitan
